Saturday, March 27, 2010

TURN OUT THE LIGHTS ON SATURDAY

WORLD TO EMBRACE DARKNESS TONIGHT
GLOBAL EVENT, GO DARK FOR "EARTH HOUR
BEIJING (Xinhua) - The countdown to Earth Hour is on. This weekend, on Saturday March 27, everyone world-wide is being asked to shut off the lights for one hour at 8:30 p.m. local time, wherever they may be. People across the globe will once again embrace darkness for an hour, following the call to build a low-carbon, more environment-friendly world. The grassroots lights-off campaign, known as "Earth Hour," was launched in 2007 in Sydney, when the city switched off its lights to highlight the world's climate problems. It's part of an eco-conscious effort to draw awareness to climate-change by halting energy consumption for one hour. The annual event, which falls on the last Saturday of each March, has since then become increasingly popular as it celebrates its fourth anniversary this year. The global event has enjoyed consistent backing from non-governmental organizations worldwide and the participation of thousands of towns.

In Germany, the Brandenburg Gate in Berlin will go dark after local parliamentarians, advocating environmental protection, turn off a super-size switch in front of the gate. Meanwhile, people at the site, by cycling upon special equipment, can light up a bear figure, Berlin's emblem. Last year, the lights went out at the Empire State Building, the Sydney Opera House and even the Eiffel Tower! This year organizers expect 115 countries to participate. United Nations Secretary General Ban Ki-moon also adhered in support of Earth Hour emphasizing the simple message that climate change is a concern for all the inhabitants of the planet Earth. “The United Nations is once again pleased to support Earth Hour, a global awareness campaign on climate change”.


Today around the world, people turn off their lights for an hour as a show of support for taking action on climate change. It is a powerful global message about environmental awareness, but there are also many other small actions we can do to to save energy and protect the environment.


WHAT DO THE VEDIC TEACHINGS TELL US?
No more unnecessary trips in cars. Let us use bikes whenever possible. Walk more. Participate actively in civic services such as planting trees in public places, provision of drinking water to passengers, cleaning of soiled areas, recycling of waste, protection against abuse of animals, etc. We should see the power of God manifested in everything, and then act with the utmost responsibility and care. Even a faucet that is leaking must be closed. We should save energy.


Śrīla Bhakti Aloka Paramadvaiti Mahārāja :
“Ecology and Meditation”
“Body Mind and Soul in Harmony with Nature”
“The Environment”
http://www.bhaktipedia.org/espanol/

1 comment:

Paramadvaiti Swami said...

Comida chatarra causa adicción, según estudio realizado con ratas de laboratorio

Foto: Jupiter

Abusar de ciertos productos podría generar una adicción, situación similar a la que sucede con el alcohol y las drogas.

Investigadores del Scripps Research Institute de Florida (E.U.) encontraron que los animales la consumían en exceso por ansiedad y no por necesidad.

Conozca el nuevo Construdata.com
El líder en información para el sector
de la construcción. ¡Vea más Aquí!
Construdata.com
Anuncie aquí
Además de tener una relación directa con el sobrepeso y la obesidad, científicos de Florida (Estados Unidos) encontraron que la comida de alto contenido calórico puede ser tan adictiva como el tabaco o las drogas.

El estudio, realizado con ratas de laboratorio, fue publicado por la revista científica Nature y demuestra que "un exceso de consumo de 'comida chatarra o basura' puede provocar respuestas adictivas en el cerebro" que son similares a las que se han visto en personas adictas al tabaco o a los alucinógenos, entre otros.

En esencia, las ratas investigadas terminaron convirtiéndose en comedoras compulsivas, lo que significa que adquirieron un patrón de adicción que, como es sabido, debilita la capacidad de activación de los circuitos cerebrales responsables del recuerdo de sus experiencias positivas, lo que los lleva a comer no por ese gusto, sino por compulsión, como una necesidad que no pueden detener y que, en el caso de los humanos, no les permite medir las consecuencias.

Un auténtico adicto, sea rata o humano, consume la sustancia causante de la adicción compulsivamente, aunque esté comprobado que esta es perjudicial para su salud. Es por eso, por ejemplo, que los fumadores siguen con el vicio a pesar de que noten que su salud se va deteriorando o presenten manifestaciones de enfermedades, como las que afectan su garganta o pulmones.

Cambios en el cerebro
Incluso, durante el seguimiento, los científicos encontraron que hubo un descenso en los niveles de un receptor específico de dopamina (un neurotransmisor cerebral) en las ratas con sobrepeso, fenómeno que también se da en los humanos que presentan adicción a las drogas y a otro tipo de sustancias.

Según el grupo de investigadores del Scripps Research Institute de Florida (Estados Unidos), encabezados por el profesor Paul Kenny, al ofrecerles a las ratas una comida de alto contenido en calorías, como tocineta, salchichas o pasteles, junto a comida más sana -aunque menos apetecible- que forma parte de su dieta habitual, los animales optaban por la primera y engordaban así rápidamente y luego la buscaban afanosamente, sin una razón, como tener hambre.

Su respuesta a los recuerdos agradables también se debilitó, incluso dos semanas después de haber dejado la comida chatarra.

Para desarrollar el estudio, los científicos adiestraron a las ratas para que dejaran de comer cuando se encendía una luz porque, en caso de seguir haciéndolo, recibían descargas eléctricas en sus extremidades. Las ratas de peso normal dejaban de comer al encenderse la luz, incluso cuando se las tentaba con la más apetitosa 'comida basura', pero las obesas, acostumbradas a ingerir este tipo de comida, seguían comiendo.

También, los científicos disminuyeron artificialmente los niveles del receptor de dopamina en otro grupo de ratas, lo que aceleró su pérdida de sensibilidad al recuerdo positivo cuando se les suministraba una dieta de alto contenido calórico.

Londres (EFE)